Ir al contenido principal

Caso 3: spoiler alert: Las transaminasas no son buenas para el diagnóstico.

Hola de nuevo querido lector! Esperamos que no te haya quedado trauma de todo el alcohol que nos encontramos en el caso número 2, porque es momento de que te enfrentes a la prueba final: caso 3. Ya te hemos enseñado a cómo enfrentarte a un análisis clínico y sacar pocas conclusiones importantes con pocos datos, así que confiamos en que este tercer caso sea pan comido. 


Para ponerte en contexto, llegó a urgencias un hombre mayor, de unos 65 años, que mostraba una clara ictericia (lo de los Simpson, que no se te olvide). Con este panorama, la Dra. Guiomar Báltico (hay más gente que se llama Guiomar en ese hospital que sobres en la Calle Génova), solicitó diversas pruebas para conocer el motivo de esta ictericia. Al realizar los análisis, dimos con varias cosas, cuanto menos curiosas. 


Empecemos por lo fácil: los niveles de BR estaban por las nubes, 10 veces más de lo que cabría esperar. Eso ya nos lo esperábamos, puesto que si hay ictericia es por exceso de BR.

La verdadera cuestión aquí es cuál era la causa de esa acumulación de BR. La bromita de siempre de la canción de que le sube la bilirrubina, no hace falta que te la diga en cada entrada que si no me repito más que un potaje en agosto. Ya sabes que esta acumulación puede deberse a tres motivos: hepatitis, colestasis o degradación excesiva de glóbulos rojos.

Teniendo esto en cuenta, si te decimos que en los análisis de sangre  se encontraron niveles excesivos de GGT y de FA, y en los análisis de orina se detectó BR, pero no urobilinógeno, ¿Cómo te quedas? Pero antes de saltar a conclusiones, seguro que te has preguntado: ¿Y las transaminasas? (Si no te lo has preguntado es normal, con tanto nombre debes estar más perdido que un profesor con dos alumn@s gemel@s 🙁).



Pues las transaminasas estaban normales, ALT estaba algo elevada, pero nada excesivo y el ratio AST/ALT estaba por debajo de 1, con lo cual puedes descartar hepatitis alcohólica (vaya por dios, yo que iba a llamarle borracho ya), si es que en algún momento lo planteaste. Aún así, el resto de parámetros están alterados y al paciente algo le pasa, la situación es un poco así:


Con toda esta información deberías poder intuir el motivo de los parámetros alterados de la analítica. En caso de que ya tengas una idea en la cabeza, vamos a ponértelo más fácil: selecciona una de las tres opciones siguientes, sólo una opción es correcta, confiamos en ti.


                         Hepatitis aguda vírica   Se ha pasado con el simtrón   Colestasis 


Una vez que ya sabes cuál es la principal sospechosa de ser responsable del aumento de la BR, es momento de la parte más divertida (aunque penséis que tenemos menos ritmo que una gotera, nos esforzamos por haceros reír) de estos casos clínicos. ¿Qué crees que necesita saber la Dra. para afinar su diagnóstico? ¿Qué más pruebas harías tú y con qué finalidad? 


Por si te has quedado más blanco que la experiencia laboral del rey Juan Carlos, la Dra. Báltico necesita saber a qué se puede deber la colestasis, con lo que hacer una ecografía para saber si es intra o extrahepática ayudaría mucho y en caso de deberse a un tumor habría que realizar una biopsia (le sacamos un trozo de hígado) para saber si es maligno o no. Pero antes de todo eso, tienes que asegurarte de que sí que es colestasis, por ello un análisis de colesterol y de tiempo de protrombina serían ideales, ya que si ambos parámetros están aumentados la colestasis es casi segura. 


Queda una última duda y es la de ¿por qué las transaminasas no han aumentado? Como recordarás del caso 1, que trataba de una hepatitis aguda derivada a colestasis, lo que sucedía era que había un daño hepático en forma de lisis de hepatocitos y de ahí los niveles tan altos de transaminasa en sangre. En este caso, los valores normales de las transaminasas nos pueden indicar una correcta función hepática y que el problema sea a nivel del colédoco (el conducto que conectaba el hígado con el intestino), lo que habría que confirmar con una ecografía. 


Con esto damos por finalizados los casos clínicos sobre problemas hepáticos, pero esto es solo el principio, queda mucho que aprender, seguro que nuestro siguiente tema te va a causar interés: el riñón y por qué se vende tan bien en el tráfico de órganos. Ah y, cómo no, el link de recompensa, te mereces una pequeña alegría después de todo este esfuerzo.


Comentarios

Entradas populares de este blog

Caso 2: Sabes como entras pero no como sales

¡¡¡¡Estamos de vuelta con un nuevo caso amigos!!!! Esta vez, era la Dra. Guiomar Rojo la encargada del paciente, un hombre de 45 años que fue a hacerse una analítica rutinaria. Aparentemente sin síntomas, aunque ahora veremos que su analítica decía lo contrario, ¿Sospechoso verdad? Más sospechoso que La Casa de las Carcasas. Veamos lo que nos encontramos cuando hicimos las analíticas. Al ver que sus transaminasas, sobre todo la AST, la fosfatasa alcalina y la GGT estaban más altas que Gasol en tacones , pensamos en un problema hepático, y nos pusimos en contacto con la doctora para intentar buscarle una solución. Ella recibió a su paciente en la consulta para hablar de estos resultados y tras palparle el abdomen detectó que tenía hepatomegalia, o lo que es lo mismo, el hígado más grande que la frente de Pepe Viyuela. Teniendo esto en cuenta, ¿Cuál sería vuestro posible diagnóstico? .  La Dra. tenía claro que este hombre tenía el hígado horriblemente mal, pero descartó que se tratase

Caso 1: seguimos con la dolores

Hola de nuevo Novat@s, ya estamos de vuelta con el interesantísimo caso del riñón.  Hoy hemos podido tomar un café con la Dra. Guiomar y por fin nos ha podido poner al día con el caso de la dolores.  Al parecer, volvió a por los resultados del análisis y... MADRE MÍA CHICA. No sé  cómo seguía en pie.  Os vamos a dejar por aquí abajo el curioso análisis de esta persona. En vista de estos resultados, podemos decir que esta persona se encuentra en un apuro. Tiene hematuria, proteinuria y un fallo en la filtración glomerular. Vamos, que el riñón ese está peor que pegarle a un padre en navidad. Esto le hizo pensar a la Dra. que efectivamente tenía un problema en el riñón y para intentar encontrar la raíz del problema decidió que hacerle un TAC con contraste sería lo mejor. Evidentemente, a la mujer casi le da un pampurrio en la consulta porque no le gustan estas cosas de médicos, y menos los espacios cerrados. Al final, la novia le dijo que si conseguía meterse en esa máquina con forma de